Nací en Colombia y cuando tenía 18 años me vine a vivir a Alemania. Aquí estudié psicología y trabajo ofreciendo asesoría psicológica en un colegio.
Un día, cuando salía de una cita con un nuevo estudiante, me di cuenta que durante los siete años en los que llevo trabajado en el colegio, he presenciado muchas veces la misma situación con alumnos o con padres de familia que vienen a verme por primera vez. Son personas que suelen encontrarse en situaciones de extrema angustia y que llevan tiempo preocupados porque no cuentan con la información básica de psicología que todos debemos tener para asegurar nuestro bienestar mental.
Ese día, también me di cuenta que en la mayoría de los casos me paso las primeras sesiones con los padres intentando desestigmatizar sus experiencias y dándoles información básica sobre psicología, diagnósticos y salud mental. Lo que me hace pensar, que si hubieran tenido acceso a esta información mucho antes, habría por lo menos aliviado parte de su ansiedad y dolor. También reflexioné sobre las preguntas que escucho frecuentemente…y pensé en las preguntas que escuchaba entre mis amigos y amigas, mi familia y las personas que se ponen en contacto conmigo. ¿Por qué me siento tan mal? ¿Cómo he llegado hasta aquí? ¿Cómo puedo avanzar? ¿A quién debo escuchar? ¿Cómo puedo buscar ayuda cuando la terapia y otras formas de apoyo son tan caras? Pues, yo también me he hecho estas preguntas.
Hay una razón por la que nos hacemos estas preguntas cuando tenemos problemas con nuestras emociones y salud mental. No aprendemos a entender nuestras emociones o quiénes somos. En cambio, aprendemos a tenerles miedo, sentir vergüenza e ignorar las señales de cualquier tipo de angustia. En vez de aprender las estrategias adecuadas, aprendemos a poner una cara valiente. En vez de animarnos a aceptar todo lo que somos, incluidas las imperfecciones y debilidades, se espera que creemos una marca personal para mostrarla al mundo exterior, ocultando lo que realmente sentimos y quienes somos, incluso a nosotros mismos.
Como no contamos con las herramientas necesarias para manejar el estrés, y entender nuestras emociones, fingimos que todo está bien. Nos mantenemos ocupados, enterrándonos en el trabajo. Utilizamos el sexo, el alcohol, las drogas o series de Netflix como distracciones. Pero estas distracciones son temporales y no resuelven los problemas ni nos ayudan a avanzar. Lo único que hacen es retrasar lo inevitable hasta que llega la siguiente ola de estrés y es ahí cuando llega la culpa por todo lo que sentimos, lo que nos hace sentir peor, y el círculo vicioso de sentirse mal y sentirse culpable continúa.
Si supiéramos más sobre las emociones, podríamos aprender a observarlas, a no dejarnos llevar por ellas. Podemos analizarlas y cuestionarnos si realmente nos están alertando que estamos bajo amenaza. Podemos elegir cómo responder y darnos cuenta que todas las emociones son experiencias normales. Muchas personas cuando tienen su primer ataque de pánico, piensan que se están enloqueciendo, que están teniendo un ataque al corazón, o que se van a morir. Es un trabajo muy arduo pero que sin duda alguna se puede lograr. Podemos aprender a conocer nuestras emociones y aprender a cómo reaccionar en los momentos de ansiedad. Sólo tenemos que activar nuestras habilidades de afrontamiento emocional y aprender de otras personas que se encuentran luchando con problemas psicológicos y son un ejemplo de cómo responder ante estas situaciones.
Muchas personas están luchando solas en este momento, sin acceso a recursos, sin nadie con quien puedan hablar. Realmente creo que la comunidad es la respuesta principal aquí. Así nace Frau Sua, un espacio para disfrutar del desarrollo personal y autoconocimiento.
Este blog es el resultado de mis apuntes y la respuesta a las preguntas que escucho a menudo. Aquí encontrarás teorías que probablemente te resuenan, y otras que no tanto.
Este espacio no es una solución rápida, no es para momentos de crisis y no debe reemplazar las consultas con un terapeuta. Tampoco es una herramienta de diagnóstico. Mi intención es ayudarte a conocerte mejor, darte herramientas para que puedas entenderte, conocerte mejor, y logres sacar el máximo provecho a tu vida. Me encantaría crear una comunidad que nos permita estar más unidas con otras personas que están viviendo situaciones similares a las nuestras.